![colegio Europeo de Madrid](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjtFrRbVaowG9VBNPXfsUqWEBkvRDIBQcA5IY9TqSBnOJdC1WeVn8Kqi_1gPa1VfLfp3fz8pM3zNKr0b9Bo4t8kBA7k2976pJbDEIhu5-7xJINHYAHVAhbaigZ_HPlaB1G6_pnpNHiW1g8/s1600/Colegio+Europeo.jpg)
Muchos estudiantes tienen que recuperar algunas asignaturas en septiembre y pasan el verano estudiando. Para algunos es un poco tedioso porque consideran que no están disfrutando de las vacaciones como debieran, pero con un poco de organización es posible aprovechar el verano a la vez que se sigue aprendiendo la materia que se necesita. Si los resultados académicos han sido menores de lo esperados a pesar de haber hecho el esfuerzo es posible que necesites la ayuda de un orientador escolar que te dé las pautas para estudiar mejor. En el Colegio Europeo de Madrid cuentan con un sistema educativo que garantiza los aprobados de los alumnos mediante las técnicas didácticas adecuadas a través de una atención personalizada al alumno.
Otros alumnos, simplemente, aprovechan esta época del año para reforzar algunas asignaturas o adquirir nuevos conocimientos como un segundo o tercer idioma. Sea cual sea el caso, si tienes que estudiar en verano es conveniente que sigas una serie de pautas para mejorar los resultados académicos y conseguir unas calificaciones excelentes con el mínimo esfuerzo.
Ocio y estudio
No es bueno darse atracones de estudios porque acabarían siendo contraproducentes. Lo mejor es compatibilizar todas las actividades que queramos, siempre que sea posible, para que el cerebro descanse. Por ejemplo, organizando el día de manera en que se pueda ir a la piscina un rato después de haber estado estudiando. También es conveniente dejar algún día de la semana libre de estudio y dedicarlo exclusivamente a nosotros. Así será mucho más llevadero y el cuerpo descansará más.
Marca unos horarios
Además de compaginar actividades de ocio y de estudio, los expertos aseguran que si el estudio se planifica previamente da mejores resultados. Si hay varias materias, lo bueno es intercalarlas para no sobrecargarnos, aunque siempre dejando un tiempo prudencial para poder asimilar los conocimientos. Si durante el resto del año hemos mantenido una rutina similar y no ha funcionado, tal vez haya que cambiar los horarios. La ventaja del verano es que al no tener que asistir presencialmente a las clases nos permite organizar el tiempo mejor. Hay quienes son más productivos a primera hora de la mañana y quienes aprovechan mejor las tardes. Sabiendo cuál es nuestro caso podremos organizar mejor el tiempo para conseguir un rendimiento mucho más alto en los estudios.
Calor e hidratación
La desventaja del verano es que en esta época del año hace mucho calor. El aumento de temperaturas dificulta la concentración y es complicado estar mucho tiempo estudiando. Por eso lo mejor es buscar una habitación ventilada en la que haya una temperatura aceptable y con una buena iluminación. También tenemos que tener cuidado de no deshidratarnos, porque también perjudica a la capacidad de absorción de conocimientos que tenemos. La alimentación es muy importante a la hora de estudiar porque un déficit de nutrientes o vitaminas puede hacer que nos cueste más trabajo concentrarnos. Debido a esto, no debemos descuidar ni las horas de comida ni la ingesta de líquidos para mantener el cuerpo hidratado.